Vicente e Isabel han vuelto a comer a Zaragoza tras un breve paso por la capital condal. Han madrugado este domingo para acudir a la manifestación en el corazón de Barcelona con otro centenar de personas que partían desde primera hora de la capital de Aragón. Desde dicha ciudad se han fletado dos autobuses y desde Huesca otro más, como también lo ha hecho un autobús desde Murcia, que ha salido a las 3 de la mañana. "Somos todos de Vox, simpatizantes y afiliados. Hemos venido porque la amnistía es una barbaridad, tenemos que salir a defendernos porque la izquierda siempre se ha movilizado mucho. Ahora es la derecha la que tiene que demostrar a Cataluña que no es solo de los catalanes sino de España", ha contado Isabel a Vozpópuli.

"Puigdemont, a prisión"

Retornan ahora a sus casas después de una intensa mañana donde 300.000 personas, según datos de Sociedad Civil Catalana (SCC), han alzado su voz contra la amnistía y la autodeterminación. La marea rojigualda, repleta de carteles de 'Amnistía No' y gritos coreados de 'Puigdemont a prisión' arrancaba este domingo alrededor de las 12 horas encabezada por la presidenta de SCC, Elda Mata Miró-Sans, el vicepresidente de la sociedad, Alex Ramos y el exalcalde socialista Paco Vázquez, cuyo discurso ha sido de los más aclamados durante la protesta. A la manifestación también ha acudido el líder nacional y autonómico de Vox, varios representantes de Ciudadanos y el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

El rechazo frontal a la amnistía ha sido el imperativo latente de toda la jornada y así lo han expresado los organizadores nada más empezar: "Queremos que no siga adelante con una aberración constitucional a cambio de favores políticos. Este es un acto de convivencia e interpelamos a todos los ciudadanos. Consideramos que para contentar a 1,5 millones de separatistas estamos confrontándonos con la mitad de España conservadora, no nos parece una política de convivencia sino de conveniencia", ha expresado Ramos a los medios. A la pregunta sobre las declaraciones de los socialistas, que han tildado de radicales a la asociación constitucionalista, los líderes han contestado que la radicalidad está en pactar con radicales. "Creemos que tiene que haber una política de pactos entre la centralidad política, centro derecha e izquierdas", ha concluido.

La cabeza de la manifestación ha ido bajando a lo largo del Paseo de Grácia con una enorme pancarta que sentenciaba "No en mi nombre" tanto en castellano como en catalán. Un grito que se ha escuchado a lo largo de toda la mañana a medida que avanzaba la masa colectiva al ritmo de Nino Bravo con la canción 'libre' u 'Hoy puede ser un gran día' de Joan Manuel Serrat. El sol fulminante de este domingo no ha parado el avance de miles de personas tras la pancarta donde, a parte de los lideres de SCC, también se agolpaban empresarios catalanes y simpatizantes a SCC, como los barceloneses Antonio y Ana, quienes han acudido a todas las manifestaciones constitucionalistas y "a todas las que haga falta" por un Sánchez que "sólo quiere mantenerse en el poder".

Los momentos más incómodos se han dado a los pocos minutos de empezar la manifestación cuando unas mujeres con una gran pancarta en contra de Felipe VI han tenido que ser escoltadas por los Mossos para retirarse de la concentración por los insultos recibidos. También otro momento anecdótico se ha dado antes de empezar la marcha cuando una mujer ha desplegado una bandera independentista en defensa de la amnistía y ha sido duramente criticada, generando momentos de tensión. Sin embargo, en su totalidad la marcha ha transcurrido con total normalidad hasta su punto final: el escenario levantado en la confluencia de Gran Vía.

Discursos finales: honor a la Constitución

Ha sido en este punto final donde la multitud se ha enardecido ante las arengas de los líderes de SCC, al profesora de derecho constitucional, Teresa Freixa, y el exdiputado socialista y exalcalde de La Coruña, Paco Vázquez. Este último ha lanzado un dardo a los socialistas al expresar que cualquier voto a favor de la amnistía es el "peor de los perjurios: el perjurio ideológico". "Nosotros seguiremos la linea de la convivencia de las Cortes de Cádiz", ha declarado. "Quieren volver a imponer las dos España. Ya votamos un referéndum con la Constitución y en Cataluña tuvo el 90 por ciento. Hoy estamos aquí los valientes y los ofendidos. Se quiere deslegitimar el imperio de la ley", ha dicho, visiblemente exaltado y con un librito de la norma suprema del ordenamiento jurídico español.

Vázquez ha aprovechado su discurso para criticar duramente al bloque secesionista, a quienes ha acusado de desacatar las sentencias de los tribunales para que luego repitan "el golpe de Estado". "A esos que marcan el progreso, ¿qué progreso, el de la amnistía? Para quienes para quienes hablan de derecho de los territorio y se olvidan de las personas, para los que convierten la educación en un instrumento de adoctrinamiento", ha recalcado, y ha rendido un homenaje a Miguel de Unamuno y a Manuel Azaña, quienes, ha dicho, hoy serían tachados de fascistas.

Finalmente, la presidenta de SCC catalana ha cerrado el acto, que ha terminado alrededor de las 14 horas, con un discurso final agradeciendo la afluencia de gente. "Estamos aquí los ciudadanos que sí aprendemos de la historia, que sí respetamos a nuestros mayores, los que exigimos el fin de la amnistía y el pacto para todos los españoles, todos los que estamos aquí defenderemos sin desfallecer los valores de la democracia. No en mi nombre, ni amnistía ni autodeterminación. Viva España y viva el Rey".

Concluye así otro 8 de octubre que cierra filas en contra de la línea soberanista catalana, con miles de voces en contra de la hoja de ruta de la CUP, ERC y Junts y que ha tenido este año como principal exponente a Pedro Sánchez en el centro de la diana. Una imagen que se ha concretado de forma caricaturesca en el centro de la manifestación con un Falcon de cartón y la cara de Sánchez encima con una nariz imitando claramente a Pinocho por su extensión. Su 'hacedor', Pablo, ha contado a este medio que lo manufacturó por la noche para representar a un presidente del Gobierno que "solo quiere mantenerse en el poder". "Lo guardaré en el garaje porque ya ha cumplido su función", ha contado, "lo he hecho expresamente para este día".

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