El último auto del juez Ruz que ha provocado la dimisión de la ministra de Sanidad, Ana Mato, ha servido para cerrar una de las piezas del sumario sobre la trama de corrupción. Sin embargo, todavía quedan otras ocho investigaciones dentro de la causa que seguirán haciendo temblar los cimientos de Génova 13 en los próximos meses. 

María del Carmen Rodríguez Quijano comunica al juez Ruz que cambia de letrado. Acompaña el escrito con una carta del que ha ejercido este papel hasta ahora en la que éste apunta que abandona dicha función porque aún no ha cobrado un euro de su minuta. Es el mismo abogado que defiende su marido y que lleva más de un año pidiendo al magistrado que libere dinero embargado para poder cobrar.

En el extesorero del PP Luis Bárcenas ha terminado imponiéndose entre rejas la táctica del sálvese quien pueda, en la que no encajaba el penalista Miguel Bajo, hasta ahora su abogado defensor. Así se interpreta en el Gobierno su decisión de prescindir de él y de cambiar de forma radical su estrategia, que parte de la intención de empezar a colaborar al máximo con el juez Pablo Ruz en la instrucción del ‘caso Gürtel’ y en la pieza separada que más le atañe, la de la contabilidad del propio partido.

Quién le iba a decir al expresidente del Gobierno que llegaría a ver un acuerdo entre su partido y el Grupo Prisa para enterrar su carrera política y sumirle en el desprestigio. Pues esto es, precisamente, lo que José María Aznar está convencido que ha ocurrido, que Mariano Rajoy ha alcanzado un pacto con Juan Luis Cebrián para que el grueso de la artillería de la trama Gürtel se dispare contra él.