La situación económica que atraviesa EEUU es crítica. El país se encuentra sumergido en una espiral de déficit y deuda que se originó en la Gran Recesión y que se agravó con motivo de la pandemia. La subida, a largo plazo, de los tipos de interés (en torno al 5%) y el elevado envejecimiento de la población, apunta a una deuda pública que va camino de superar el máximo acumulado durante la Segunda Guerra Mundial