PSOE y Sumar presumen a menudo de ser "el Gobierno más feminista de la historia". De contar con el Consejo de Ministros más paritario. Y de ejercer un programa de políticas igualitarias "a la vanguardia" y en el que "se reflejan otros países de Europa y del mundo". Todo ello lo ha dicho Pedro Sánchez, presidente de ese Gobierno, formado por el PSOE y Sumar, que durante su liderazgo ha tenido a consumidores de prostitución y presuntos acosadores sexuales entre sus filas.
Los casos Tito Berni y Ábalos, en el PSOE, y el más que futuro presunto caso Errejón, en Sumar, desmontan de un plumazo el discurso de los dos partidos de izquierdas que conforman el Gobierno de España. Los comportamientos de ambos, con altas responsabilidades en el Ejecutivo y en el Congreso de los Diputados, chocan frontalmente con todo aquello que siempre han defendido públicamente en sus declaraciones públicas. Y evidencian la doble moral de la izquierda en una cuestión tan sensible como la del feminismo, causa de la que muchos han hecho su negocio económico o político.
'Caso Tito Berni'
La presunta trama de corrupción en torno al exdiputado socialista canario Juan Bernardo Fuentes Curbelo, cuya operación se denominó 'El Mediador', por la figura de Marco Antonio Navarro Tacoronte, la persona que presuntamente recaudaba el dinero y ponía en contacto a los políticos con empresarios, presumía de consumir drogas y prostitución. Las fotos que se conocieron en el informe policial, mostraban al entonces diputado Fuentes Curbelo y a Navarro Tacoronte, con varias mujeres en una habitación. Era habitual, en plena pandemia, que algunas noches acudieran a un céntrico hotel de Madrid para hacer uso de los servicios sexuales de las prostitutas.
'Caso Ábalos'
También en la presunta trama de corrupción en torno al exministro de Transportes, Agenda Urbana y Movilidad, José Luis Ábalos, hay mujeres que han recibido beneficios para acompañar a algunos de los señalados por la UCO en su informe. En concreto, varias empresas de la trama, controladas por el preso Víctor Gonzalo de Aldama, se hizo cargo del pago del alquiler de un ático de lujo en un edificio de la Plaza España de Madrid para una mujer de nombre Jésica, con la que el exministro Ábalos mantuvo una relación sentimental durante un tiempo determinado.
Íñigo Errejón
El último caso que ha azotado al Gobierno de coalición es el que afecta al ya exportavoz de Sumar en el Congreso, Íñigo Errejón, señalado por varias mujeres por haber presuntamente abusado y acosado sexualmente de algunas de ellas. Los hechos, que se han conocido a raíz de su dimisión este jueves, se remontan a varios meses atrás. En 2023, sin ir más lejos, una chica denunció en sus redes sociales haber sido víctima de un presunto tocamiento por parte de Errejón. Posteriormente, según su relato, la exjefa de gabinete del portavoz parlamentario de Sumar, Loreto Arenillas -ahora diputada en la Asamblea de Madrid, llamó a la mujer para evitar que hiciera públicos los hechos. Ofreciéndole algún tipo de acuerdo para silenciarlo.
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