Pilar Eyre acaba de publicar su última novela ‘Un amor de Oriente’ en el que narra las desavenencias, tristezas y alegrías de Muriel, una filipina que se casó embarazada y llegó al altar entre lágrimas, tal y como le ocurrió a Isabel Preysler. Se trata de una vida paralela, por no decir la misma, entre la protagonista y la socialité que la periodista ha preferido ocultar bajo otro nombre para, posiblemente, evitar demandas.