Roberto Rodríguez Casas, representante del magnate albanés Razart Taçi y de un holding ruso-ucraniano en las negociaciones para adquirir el club andaluz, está imputado en un macrosumario por montar presuntamente la estructura de 'lavado' de dinero negro de varios narcotraficantes. Consejero delegado de Footag S.L., una empresa de asesoramiento y representación de futbolistas que ya ha levantado las sospechas de la Agencia Tributaria, en las conversaciones telefónicas interceptadas por la Policía presumía de ser el representante de Van Nistelrroy, de haber colaborado en la elección de Florentino Pérez como presidente del Real Madrid y de haber participar en el trapaso de Diego Capel del Sevilla CF a un equipo portugués.