Los informativos de La 1 han ganado en el último año un 1,4% de audiencia y 150.000 espectadores, mientras que los de las cadenas privadas han perdido fuelle. La menor agitación política –el año pasado España estaba a la espera de unas elecciones generales y con un Gobierno en funciones- ha perjudicado a Mediaset y a Atresmedia, y ha beneficiado a TVE.

Con el nombramiento de Eladio Jareño como director de TVE, el PP ha logrado que toda la cúpula de la corporación esté ocupada por periodistas de la órbita del partido. Su presidente, José Antonio Sánchez, ha ostentado sus más altos cargos con el partido conservador en Moncloa y su nombre incluso figura en los papeles de Bárcenas. A Enrique Alejo, el director general corporativo, se le considera como el hombre fuerte de Montoro. Y Álvarez Gundín sigue en los informativos una línea amable con Génova 13.

Los periodistas del ente multiplican las críticas en las redes sociales. El Consejo de Informativos elabora un informe con ejemplos de manipulación. Echenique asegura en una respuesta parlamentaria que la cadena pública no emitió silbidos al PP en una manifestación de las víctimas "porque no teníamos las imágenes". Aquella marcha se ilustró en el Telediario con una imagen que mezclaba imágenes del PSOE y ETA.