Los programas de política que tantos dolores de cabeza ocasionaron en Moncloa hace un par de años han perdido una parte de su audiencia durante las últimas semanas. El fin del periodo de desgobierno ha afectado a estos formatos, que últimamente han ofrecido algunos síntomas de agotamiento. Los informativos de las cadenas privadas sufrieron en diciembre una caída de 569.000 seguidores.

Hace unos días, la escritora Lucía Etxebarría anunciaba que se marchaba de España. Su exilio, tan distinto de los de hace medio siglo, es más mediático que ideológico y tiene su origen en la malograda experiencia en un reality emitido en una cadena, con la que Sánchez Dragó ha tenido sus enganchadas. ¿Espectáculo? ¿Debate? ¿Sobre qué polemizan los escritores hoy día?